AVANZADA SUR
2024
La versión 2024 de Avanzada Sur se ha caracterizado por promover una experiencia colectiva enraizada en el territorio, despertando reflexiones desde una perspectiva decolonial y abrazando los saberes ancestrales. Así mismo, se ha puesto el foco sobre la ecología y la relación entre seres humanos y el mundo vegetal.
Las residentes actualmente investigan y crean a partir de metodologías englobadas en prácticas y miradas feministas colaborativas; vinculando arte, territorio, ciencia y tecnología, desde lenguajes que devienen de la danza, artes visuales, fotografía, performance y más.
RESIDENTES 2024
Y PROYECTOS EN DESARROLLO
MAILZA BERNARD
Brasil
Madre y artista multimedios, Licenciada en Cerámica por la UFSJ. Se identifica como mujer ‘miscigenada’, con herencia euro-indígena, razón por la cual enfrenta con frecuencia el desafío de la “no pertenencia” social y cultural. Su arte surge como respuesta a esto, fusionando la cerámica con estudios antropológicos de plantas aromáticas, cosmovisiones y memoria ancestral.
Proyecto Odora
Los Andes se revelan como la gran frontera natural que separa Brasil y Chile, o la matria de Mailza Bernard y el espacio donde toma lugar Avanzada Sur. ¿Cuáles serían los puntos de conversación entre estos lugares? ¿Qué ascendencia comparten como territorio?
Los bosques del sur y el «olor verde húmedo» abren su investigación hacia la relación entre la memoria y los aromas. Particularmente, a propósito de cómo la desconexión de las esencias nativas puede llevar a una pérdida de identificación con el propio territorio, afectando la percepción y la pertenencia. Mailza continúa profundizando en la historia etnobotánica de las plantas que aparecen en el camino entre ambos territorios, surcando y desdibujando los límites entre culturas y naturalezas.
DANIELLA SANTIBÁÑEZ
Chile
Artista escénica, performer y pedagoga. Licenciada en Artes con mención en Danza en la Universidad de Chile. Guía la práctica corporal de danza e improvisación Bomba Solar, en la cual investiga en espacios abiertos y cerrados la exploración del propio lenguaje corporal, en relación a la energía colectiva con el tránsito de la luz del sol.
Ensayos sobre la Luz
Al tiempo que los días en el Hemisferio Sur se hacen más cortos y menos claros, aparecen las iluminaciones para Ensayos sobre la Luz, de Daniella Santibáñez, que traspone preguntas y prácticas donde el cuerpo es carne de la experiencia afectiva de con la luz solar.
Daniella ha percibido la transición estacional en los territorios de Contuy y Melimoyu. Sus ejercicios han sido registrados mediante la instalación de cajas estenopeicas, dando origen a un archivo de solarigrafias que captan el tránsito de la luz del sol. A diferencia de prácticas performativas anteriores, la artista se propone profundizar en los procedimientos de la fotografía análoga como un medio para conectar los alcances de la luz sobre lo terrestre. «En otras palabras, probar la idea de hacer cuerpo o de encarnar la luz del sol y ficcionar con ello que el cuerpo es el soporte y el umbral de esos imaginarios».
ANDREA SOLANO
Ecuador
Empezó su formación artística en artes escénicas. Luego cursó Teatro en la Universidad Central del Ecuador. Junto a un grupo de colegas, medió diferentes actividades en torno a la cultura, el arte y los procesos sociales, a través de la okupación de un espacio/casa en la ciudad de Kito. En 2021 se muda a la comunidad kichwa de Kotama para empezar un proyecto de autoconstrucción. Actualmente se dedica a su tesis de postgrado, enfocada en la visualidad de los entornos de producción y consumo de chicha de maíz.
Justicia Espiritual ASWA
Semanalmente, Andrea prepara chicha, uno de los tantos resultados del arte de fermentar. A la par con este ejercicio, imagina visualidades donde dialoguen cuerpo y fermento, cuyas posibilidades narrativas del presente, inevitablemente encuentran eco en las formas de esta práctica ancestral.
La pista que sigue Andrea se encuentra entre el cuerpo humano y el cuerpo contenedor del fermento o «fondo», vasija de barro donde se fermenta la chicha tradicionalmente. Observa y estudia los recipientes en los que las personas fermentan en la actualidad –vidrio, plástico, madera, barro– como un modo de comprender los tipos de contenedores de estos líquidos y de estos modos de vida. Una forma de arqueología alquímica que aspira a descifrar los terrenos que circundan el proceso de fermentación. Mientras eso sucede, la artista prepara una acción en su territorio ecuatorial para el próximo solsticio del 21 de junio, como un gesto-compromiso con la corporalidad, el fermento y el espacio.
TAINA VILLALOBOS
Chile
Es una Guardadora de Semillas y artista visual titulada de la Universidad de Chile. Desde sus inicios ha trabajado con lo audiovisual y lo instalativo-escultórico. El camino artístico que ha escogido en los últimos años ha expandido sus horizontes, llevándola a explorar en modo difusión de obra, hacia el mundo de los largometrajes.
Memorias del Suelo
Taina urde las tramas terrestres para activar las Memorias del Suelo. Convive con las plantas y su ciclo de transformación como un medio para profundizar en su investigación en torno a las semillas orgánicas y su propagación por espacios rurales y urbanos. Por estos días, el foco de sus exploraciones está en la traducción de las rutinas de una guardadora de semillas hacia los lenguajes de lo poético y lo artístico. Un cotidiano de investigación y cuidado constante, como proceso creativo, que encuentra su profundidad en la construcción de bitácoras de esta labor, compuestas por fotografías, escáner de semillas, pensamientos fugaces, fragmentos de libros y un intercambio de sensibilidades, posibilitado también por otras guardadoras y guardadores.
Memorias del Suelo es un proyecto de intercambio de semillas que toman la forma de esculturas, videoarte o instalaciones, obras que serán activadas en vivo al modo en que sucede en los escenarios cotidianos de este oficio, como lo son las casas de semillas o el invernadero, donde, «latentes, esperan su época de germinación para ser propagadas».
Paloma Pollan
Argentina
Ha realizado proyectos audiovisuales e instalaciones, residencias y talleres. Su práctica artística tiene un enfoque de afuera hacia adentro, en la integración directa con el territorio, permitiendo que éste le proponga los encuentros y líneas de exploración. Sus procesos creativos surgen de una conexión íntima con el entorno, integrando la influencia sensorial y afectiva.
Paisaje Comestible
¿Cuáles son los alimentos tradicionales que definen la cultura de una comunidad? ¿Qué significados tienen en la memoria afectiva de sus habitantes? Sobre el rol de la comida en la construcción de las relaciones vinculares comunitarias y el papel de los conocimientos alimentarios ancestrales para la preservación de la biodiversidad y la identidad de una comunidad, investiga Paloma.
Paisaje Comestible indaga en torno al acto de la alimentación como ritual; aliado en el fortalecimiento de los lazos afectivos con el territorio. Para Paloma, «cuando comemos, el paisaje se vuelve literalmente parte de nosotros. Nuestro cuerpo absorbe la energía, los nutrientes de estos alimentos y se da una especie de simbiosis con el entorno que crea una nueva identidad que nos define y nos afecta física, emocional y mentalmente». Cómo podemos rescatar y mantener frescos estos saberes es una de las preguntas que motiva esta investigación. Llevado a la práctica, Paloma recolecta elementos del paisaje y explora las potencias de conservación de las distintas huellas orgánicas del paisaje.
Pantera Villalva
Argentina
Activista antirracista, marica y afroargentino dedicado a la investigación en danza, performance y artes visuales. Su producción artística representa el contraataque y hechizo a un régimen colonial de muerte y de olvido. Indaga cruces entre cuerpo, identidad y memoria, a través de la experimentación, técnica de archivos, tecnologías, distintas materialidades, y de la reivindicación de saberes corporales.
Proyecto Sankofa
Pantera trabaja en torno a la simbología de la Sankofa –ideograma africano que toma la forma de un pájaro mítico. Desde ese lugar, pone el foco de su ejercicio cartográfico en las aves de la Isla Grande de Chiloé y sus historias, abriéndose paso hacia temas como la representación, la magia y los significados. Explora las potencias del terreno de lo simbólico, complementando sus hallazgos con una propuesta decolonial sobre el origen de las cosas. Su proyecto se impulsa desde un interés por la recolección de archivos del paisaje y su arquitectura, para componer derivas digitales a partir de animación, como también visuales y materiales.
Como tercer eje, Pantera explora el trabajo textil a través de la fabricación de banderas que operen como recurso para su futura muestra. «Plantar una bandera con una simbología que fue invisibilizada a mí me parece que es una invitación; una provocación para el ejercicio de la memoria, pero desde una perspectiva antirracista y decolonial».
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